martes, 30 de septiembre de 2008

04. COMPETENCIAS BÁSICAS

Uno de los aspectos novedosos que trae consigo la entrada en vigor de la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación, así como del Decreto 68/2007, por el que se establece el currículo de la Educación Primaria en la Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha, es la programación por competencias básicas. Por ellas entendemos el conjunto de conocimientos, destrezas y actitudes necesarias para que una persona alcance su desarrollo personal, escolar y social (a través del currículo, de las actividades no formales y de las distintas situaciones a las que se enfrenta día a día, tanto en la escuela como en casa o en la vida social). En definitiva, la competencia se demuestra cuando el alumno/a es capaz de actuar, resolver, producir o transformar la realidad a través de las tareas que se le proponen.
La Comunidad Autónoma de Castilla-La Mancha contempla nueve competencias básicas, que incorpora como referente curricular en todas las etapas educativas, adaptando en todo momento su contenido al desarrollo evolutivo del alumnado. De ellas, por las características de nuestro Proyecto de Innovación Educativa, sobresale tal vez el tratamiento de la “Competencia en el conocimiento y la interacción con el mundo físico”, pero basta con observar el carácter global e integral de las actividades y tareas que proponemos en dicho Proyecto para descubrir la presencia clara del resto de competencias básicas:

A) COMPETENCIA EN COMUNICACIÓN LINGÜÍSTICA: No se puede comprender e interpretar la realidad sin poner previamente en marcha una serie de habilidades lingüísticas (escuchar, conversar, leer o escribir), gracias a las cuales se construye el pensamiento y se regula el comportamiento. Así, la competencia en comunicación lingüística es algo que todos estamos trabajando constantemente (tanto en la escuela como en casa). En ese sentido, este Proyecto de Innovación Educativa pretende constituir un marco de reflexión que posibilite la expresión y la comunicación oral y escrita de ideas y experiencias por parte de todos los sectores de la comunidad educativa. De igual modo, al difundir por Internet las tareas y contenidos de nuestro Proyecto en idioma Inglés (blog, web del centro) estaremos trabajando también la competencia en la comunicación lingüística en una lengua extranjera.

B) COMPETENCIA MATEMÁTICA: Son múltiples las ocasiones en las que vamos a tener que utilizar y relacionar los números y las distintas operaciones y formas de expresión y razonamiento matemático, en las tareas incluidas en nuestro Proyecto de Innovación Educativa. Por ejemplo, al calcular las proporciones adecuadas de sustrato, arena y arcilla en las macetas de las plantas de interior; al leer el consumo de la luz y el agua y estimar sus variaciones respecto a lecturas anteriores; al calcular la distancia óptima de plantación de árboles y setos en los patios del colegio; o durante el registro diario de los diferentes parámetros recogidos en nuestra caseta meteorológica (temperatura máxima y mínima, humedad absoluta y relativa, presión atmosférica, velocidad y dirección del tiempo).

C) COMPETENCIA EN EL CONOCIMIENTO Y LA INTERACCIÓN CON EL MUNDO FÍSICO: Es sin duda la competencia que más se va a trabajar en nuestro Proyecto de Educación Ambiental, pues entre sus principios destacan el conocimiento del entorno y de los rasgos más representativos del paisaje natural y urbano, así como la puesta en marcha de medidas que favorezcan la defensa del medio y la calidad de vida (consumo racional del agua, ahorro de energía, o selección y reciclado de residuos). Se trata, en definitiva, de promover entre todos los sectores de la comunidad educativa una actuación sensata hacia el consumo, así como fomentar un uso responsable de los recursos naturales y el respeto y cuidado del medio ambiente.

D) COMPETENCIA DIGITAL Y DE TRATAMIENTO DE LA INFORMACIÓN: Vivimos en un mundo cada vez más globalizado, en el que el uso de las tecnologías de la información y la comunicación para buscar, localizar, organizar y comunicar información es fundamental. Durante la realización de este Proyecto nuestros alumnos/as van a tener que hacer uso de los procesadores de textos y de Internet de forma constante, además de familiarizarse con diversos tipos de lenguaje (textual, numérico, icónico, visual, gráfico y sonoro). Así, por ejemplo, estaremos desarrollando esta competencia cuando busquemos en un servidor información sobre las características de un determinado árbol, o sobre las enfermedades que pueden afectar a nuestra colección de cactus; o cuando queramos saber más sobre la elaboración de colonias y perfumes naturales elaborados a partir de nuestras hierbas aromáticas. También cuando creemos en el ordenador listados con consejos para ahorrar agua o luz en la escuela o nuestras casas, o cuando demos difusión a través del blog o la página web del colegio de las actividades que estamos llevando a cabo. Esta competencia, por último, también estará muy presente en los procesos de intercambio de información de nuestros alumnos/as con los alumnos/as de otros centros con Proyectos Medioambientales similares al nuestro, o durante la realización de las múltiples actividades y juegos en red que muchos organismos y asociaciones medioambientales ponen a disposición del alumnado, las familias y el profesorado.

E) COMPETENCIA SOCIAL Y CIUDADANA: La mayor parte de las tareas y actividades que proponemos desde nuestro Proyecto son actividades grupales, que implican a toda la clase (cuando no al colegio entero). Por ello es fundamental el desarrollo de este tipo de competencias, pues sólo desde la cooperación y la convivencia es posible compartir materiales y objetos, y colaborar en su cuidado. Como estamos explicando a lo largo de estas páginas, nuestro Proyecto Medioambiental aborda tareas de muy diversa índole, que hacen necesario la redacción de normas de conducta y convivencia que favorezcan el trabajo en equipo y rechacen de pleno cualquier tipo de marginación y discriminación.

F) COMPETENCIA CULTURAL Y ARTÍSTICA: Creemos que el estudio de los bienes naturales constituye una excusa idónea para potenciar la expresión y la creatividad de nuestros alumnos/as. Así, en el marco de este Proyecto, las oportunidades de trabajar esta competencia serán habituales (composiciones artísticas con materiales desechables o reciclados; talleres de dibujo o pintura al aire libre; elaboración de murales temáticos sobre los diversos centros de interés medioambiental, etc).

G) COMPETENCIA PARA APRENDER A APRENDER: La puesta en marcha de una escuela que apueste por el medio ambiente, en la que todos sus integrantes participen de forma activa en su cuidado y conservación, constituye, desde nuestro punto de vista, un escenario privilegiado para el fomento y desarrollo de estrategias de aprendizaje autónomas. En el día a día de las tareas subyacentes a este Proyecto se van a presentar multitud de oportunidades en las que nuestro alumnado habrá de recoger y organizar la información de forma práctica (uso de esquemas para identificar los aspectos básicos de un centro de interés determinado; mapas conceptuales que integren la información más relevante sobre una determinada planta: siembra, floración, riego, condiciones de iluminación, temperatura, etc). Asimismo, al ser tareas que se prolongan en el tiempo, se ofrece siempre la posibilidad de revisar el trabajo, de analizar los aciertos y los errores, alentando en todo momento la búsqueda de alternativas y la toma de decisiones.

H) AUTONOMÍA E INICIATIVA PERSONAL: Tareas básicas dentro de nuestro Proyecto de Innovación Educativa, como por ejemplo la creación y funcionamiento de un huerto escolar ecológico, exigen al alumnado una planificación de la acción a desarrollar y el establecimiento de unas metas y objetivos a alcanzar. Todo ello conlleva un desarrollo de su capacidad para elegir y tomar decisiones, así como la aceptación de responsabilidades y la evaluación de los resultados, con vistas a detectar posibles errores y proponer mejoras posteriores.

I) COMUNICACIÓN EMOCIONAL: Sin duda es uno de los fines que perseguimos con nuestro Proyecto: conseguir que nuestros alumnos y alumnas establezcan una relación positiva con los demás, que les permita construir de forma segura su autoconcepto y autoestima. Así, tareas como el cuidado de los árboles de nuestros patios, o de las plantas del huerto o del pasillo, son ejemplos claros de situaciones en las que a menudo hay que aplazar las demandas o recompensas, o bien a aprender a tolerar los pequeños fracasos y no regocijarse ante los demás de los éxitos personales.

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